Palabras
Kafkiano, dantesco, maquiavélico, pantagruélico (curiosamente en inglés el adjetivo equivalente es gargantuan, derivado del otro gigante de la novela de Rabelais), quijotesco, sádico, donjuanesco… Vocablos nacidos de la literatura. No se me ocurre mejor forma de alcanzar la inmortalidad. En los últimos tiempos se habla también de ballardiano, adjetivo no recogido en el DRAE, pero sí en el Collins Dictionary:
BALLARDIAN: (adj) 1. of James Graham Ballard (J.G. Ballard; born 1930), the British novelist, or his works. (2) resembling or suggestive of the conditions described in Ballard’s novels & stories, esp. dystopian modernity, bleak man-made landscapes & the psychological effects of technological, social or environmental developments.
De todas formas, es bien sabido que la lengua inglesa es mucho más ágil a la hora de asumir neologismos. Recuerdo, por ejemplo, que la RAE aceptó --¡hace poco!--el término bluyín, castellanización de blue jean, para referirse a los pantalones tejanos (o vaqueros, como quieran) en una decisión digna de mejor causa, pues nadie utiliza ni utilizará jamás en castellano el extraño sustantivo. Pero, volviendo al principio, reivindico desde aquí el adjetivo bernhardiano --yo lo utilizo a veces-- para referirse a una determinada actitud, personalidad y visión del mundo, que quienes hayan leído a Thomas Bernhard sabrán enseguida identificar en su complejidad.
Labels: cavilaciones, Lengua, Literatura
3 Comments:
Pocos pueden calificarse realmente de bernhardianos. En Cataluña, poquísimos. Para consolarnos, aquí le dejo un post bernhardiano...
No he leído a Bernhard. El próximo libro será suyo. Ah! y el post recomendado de sallanworld se sale.
Saludos!!!
Hola Pluma:
Lea a Bernhard, pero cuidado, le creará una adicción de la que nunca podrá escapar. De todas formas vale la pena.
Gracias por la visita.
Post a Comment
<< Home