Feingeschliffen

All in all a very dying race

My Photo
Name:
Location: Barcelona

Tuesday, May 30, 2006

La gran ciudad II

Esta mañana, delante de la puerta de mi lugar de trabajo, un hombre se quemaba la americana. No quemaba con cuidado un hilo que estuviese suelto, no. Se estaba quemando la americana. Ante la advertencia de las mujeres que trabajan más cerca de la puerta, uno de los trabajadores abre e interpela al individuo.

--¡Hombre, que se va a quemar!

El hombre, sorprendido y asustado, se aleja por la calle.

Wednesday, May 24, 2006

Turning darkness into light


Un anónimo monje benedictino irlandés escribió este poema en el margen de un manuscrito de cuatro páginas encontrado en el monasterio de St Paul, sito en la Isla de Reichenau, en el Lago Constanza (Bodensee) junto a la frontera entre Alemania y Austria. El poema fue originariamente escrito en gaélico irlandés en el s.VIII o IX y la sensacional traducción al inglés es obra de Robin Flower y data de 1931. Existe también una digna traducción al castellano que, al igual que la que se transcribe a continuación, respeta incluso la rima.

La acertadísima comparación entre la caza de ratones por parte del gato (Pangur Ban significa gato blanco) y la caza de ideas, palabras y significados, por parte del estudioso monje, hace que el poema constituya un verdadero homenaje a todos aquellos que desarrollan un trabajo intelectual de transmisión de cultura y conocimiento.


I and Pangur Ban my cat
'Tis a like task we are at:
Hunting mice is his delight,
Hunting words I sit all night.

Better far than praise of men
'Tis to sit with book and pen;
Pangur bears me no ill will
He too plies his simple skill

Oftentimes a mouse will stray
In the hero Pangur's way;
Oftentimes my keen thought set
Takes a meaning in its net.

'Gainst the wall he sets his eye
Full and fierce and sharp and sly;
'Gainst the wall of knowledge I
All my little wisdom try.

Practice every day has made
Pangur perfect in his trade;
I get wisdom day and night
Turning darkness into light.

Monday, May 22, 2006

Silencios


Las cosas que realmente importan son aquellas de las que no se habla. Por lo menos para algunos. Mientras un problema se verbalice, no es imposible de solventar. Naturalmente que no me refiero a desgracias irresolubles, aunque también en estos casos hablar de ellas ayuda a que el trauma no se gangrene. Pero no hace falta ser tan dramático: a veces las cosas que más gustan, gustan tanto, que no se expresan (o no mucho) y no sólo, aunque también, por unos absurdos celos como los que sentía Jorge Luis Borges por Buenos Aires, sino porque el sentimiento es tan íntimo que se duda que alguien pueda compartirlo. Vaya por delante que esto puede ser, en general, un error, pero sucede muchas veces. Bastante difícil es entenderse uno mismo para pretender ser entendido por los demás.

Los miedos más profundos no se mencionan, como tampoco se habla apenas de quienes más quieres; no se considera necesario. Quedan en parte excluidos aquellos con quienes se mantiene un trato de intimidad y complicidad, pero incluso con éstos se callan cosas (y no sólo aquellos secretos que todo el mundo tiene: "there are secret things in all the whitest worlds"). La confianza para comunicarse en profundidad la da el tiempo y la sintonía mutua; a veces, se encuentra a alguien con quien el plazo se acorta drásticamente, pero hay que tener cuidado porque un estado de debilidad emocional, la noche (ya lo cantaba John Lees: "friends are hard to find, specially at night"), el alcohol... pueden llevar a confiar en quien no lo merece.

Pues eso, que mientras se hable de las cosas --con quien se haya ganado el derecho a escucharlas-- las cosas no están realmente mal, de la misma manera que si se habla constantemente y con todo el mundo de algo o alguien, ese algo o ese alguien no serán, en el fondo, tan importantes.

Saturday, May 20, 2006

Todo llega


Por fin. Al parecer había algún problema de derechos de autor y por eso han tardado tanto en editar en DVD La doble vida de Verónica de Krzystof Kieslowski. Lo han hecho, además, en una lujosa edición que incluye un segundo disco que contiene unos extras que a priori son realmente apetecibles.

Por fin se ha editado en DVD la más poética de las películas del genio polaco en la que me enamoré para siempre de Irène Jacob.

Sunday, May 14, 2006

La gran ciudad I

Domingo, nueve menos cuarto de la noche. Tomo el metro en la línea tres. Son pocas las paradas pero aprovecho para leer, al menos unos párrafos, el libro que llevo conmigo. Estoy de pie, apoyado en la puerta. Delante de mí hay un hombre joven, en la treintena, sin duda africano. De repente, con el rabillo del ojo, veo que se inclina --casi se agacha-- interesado en saber qué estoy leyendo. Un instante después oigo que dice algo. Como siempre en estas situaciones, disimulo. A continuación me habla claramente.

--Perdón señor-- dice con acento francés.

Levanto la cabeza a la vez que las cejas.

--Este libro --continúa-- ¿de qué religión es?

--No; es una novela-- contesto como si nada.

--Ah --responde él.

Parece satisfecho con la explicación.

Wednesday, May 10, 2006

De 16:30h a 18:00h

Old as the hills
Young just like the rising sun
Over fields
That lie away beneath her feet
Every time we meet
She takes my breath away
(Tomo prestada esta estrofa del tema Breathless de Camel, incluido en el álbum del mismo título).

Tuesday, May 09, 2006

Grandes actrices VII - Véra Clouzot


Solamente participó en tres películas, de las cuales únicamente he tenido ocasión de ver dos obras maestras que se convirtieron para mí desde el principio en películas de culto: El salario del miedo (Le salaire de la peur, 1953) y Las Diabólicas (Les Diaboliques 1955) ambas, como la tercera y última --Les Espions, 1957--, dirigidas por su marido Henri-Georges Clouzot. Una actriz peculiar, indudablemente, tanto por su breve carrera, ligada siempre a su marido, como por la fragilidad de su aspecto que, sin embargo, no era obstáculo para que llenase la pantalla con su mera aparición.

En El salario del miedo interpreta un papel relativamente de poco peso, ya que los auténticos protagonistas son Yves Montand y Charles Vanel, entre otros, intentando transportar camiones llenos de nitroglicerina por una impracticable carretera de montaña. Una obra maestra de la tensión. Pero donde Véra Clouzot brilla de manera inolvidable es en Las Diabólicas encarnando a la débil y enfermiza Christina Delasalle; su papel de mujer del director de un siniestro internado, en un duelo interpretativo con Simone Signoret se desarrolla en una atmósfera de terror, siniestra, con toques de tensión sexual y unas medidísimas pero espectaculares piruetas de guión. Véra Clouzot murió en 1960 de un ataque al corazón con tan sólo 47 años, bella y frágil como su personaje.

Monday, May 08, 2006

El crimen de la guardería


Cuando Henry Hamilton-Smythe minor (8) estaba jugando a croquet con Cynthia Jane De Blaise-William (9), Cynthia, con su dulce sonrisa alzó el mazo y delicadamente arrancó la cabeza de Henry. Dos semanas más tarde, en la guardería de Henry, ella descubrió su preciada caja de música. Ansiosamente la abrió y, mientras empezaba a sonar "Old King Cole", apareció una pequeña figura espectral. Henry había vuelto, pero no por mucho tiempo, ya que su cuerpo empezó a envejecer rápidamente conservando una mente infantil en su interior. Los deseos de toda una vida brotaron en tropel. Desgraciadamente el intento de Henry de persuadir a Cynthia para que colmase su deseo romántico hizo que la niñera acudiese a la guardería para investigar el origen del ruido. Instintivamente arrojó la caja de música al niño barbudo, destruyéndolos a ambos.

Texto que aparece junto a la letra de la canción The Musical Box del disco Nursery Cryme.- Genesis 1971

Saturday, May 06, 2006

Handke, el incómodo

Como si quisiera emular a su compatriota, el añorado Thomas Bernhard, el narrador, dramaturgo y poeta (“no sé si soy un poeta o un hilador de sensaciones”, según sus propias palabras) Peter Handke ha levantado una nueva polémica. Handke tenía previsto estrenar en la Comédie Française su obra Voyage au pays sonore ou l’art de la question pero el administrador general de la Comédie ha tomado la decisión de sacar de su programa la mencionada obra. El motivo: la asistencia de Peter Handke al entierro se Slobodan Milosevic. Handke, nacido en Grieffen, Carintia (Austria), se ha sentido siempre muy cercano sentimentalmente a Serbia y sus declaraciones y algunas de sus obras –especialmente Un viaje de invierno a lor ríos Danubio, Save, Moravia y Drina—ya habían merecido el (¿despectivo?) calificativo de pro-serbias. Parece que para los guardianes de la ética, en las guerras nacionalistas es muy fácil identificar a los culpables. Peter Handke se ha defendido siempre con su afiladísimo lápiz y un dominio del lenguaje (en opinión de quien esto escribe sin duda uno de los mejores escritores vivos) que para sí quisieran sus detractores. Aparentemente sólo la posición serbia en el conflicto de los Balcanes fue culpable y nada se dice del resto de los bandos. ¿Resulta políticamente incorrecto recordar, por ejemplo, al presidente croata Franjo Tudjman, declarado admirador de Francisco Franco?

Afortunadamente, artistas tan importantes como Elfriede Jelinek, Patrick Modiano, Michael Haneke, Emir Kusturica o Claus Peymann, entre otros, han salido rápidamente en defensa de Handke calificando la decisión de Bozonnet como “un acto de censura”.

Surge aquí la eterna pregunta sobre si ha de desvincularse la ideología de un artista de sus obras. Esto ya se ha planteado con autores como Ernst Jünger, Louis-Ferdinand Céline o John Ford, por citar sólo tres de los casos más conocidos. Lo que está claro es que con la no programación de la obra quien sale perdiendo es el teatro. Además, la postura adoptada por Peter Handke no parece en absoluto mal argumentada y quien tenga dudas que lea el mencionado Un viaje de invierno... :

¿Y no fue así como se llegó a la guerra –como se sabe, con la entrada de la primera milicia estatal croata en los pueblos serbios que rodean Vukovar--, una guerra sobre la que, sin embargo, alguien como yo no tiene nada que decir?; porque en definitiva sigue vigente aquel terrible “la guerra es la guerra” y aquel más terrible aún : una guerra entre hermanos es una guerra entre hermanos. Ahora quien, en lugar de entender esto como una yugulación lo entienda como indiferencia, éste tampoco hace falta que siga leyendo.

Friday, May 05, 2006

La Central


Igual que se dice lo malo ha de decirse lo bueno, por eso hay que decir que Barcelona dispone de algunas librerías del más alto nivel. Quizá no sean muchas; es más, seguramente pueden reducirse a tres, pero lo cierto es que esas tres poco o nada tienen que envidiar a las mejores librerías de capitales extranjeras. Se trata de Laie (Pau Claris 81), La Central del Raval (Elisabets 6) y La Central (Mallorca 237). Esta última ya era una magnífica librería desde su inauguración, pero después de su reciente ampliación que le ha hecho ganar 150 metros cuadrados, se ha convertido en un auténtico paraíso para el bibliófilo en el que es posible pasarse horas y horas. Simplemente espectacular. El espacio ganado correspondía a uno de los señoriales pisos del Eixample barcelonés y, en la zona donde se ha dado acomodo a los libros de música y a los CDs, existe una preciosa galería que da acceso a una terraza en la que, durante gran parte del año, sería delicioso sentarse. Sería pues de esperar que, como su hermana del Raval y como Laie, se destinara un espacio como cafetería en la cual empezar la lectura del libro recién comprado.
Cuanto más se tiene, más se quiere.

Thursday, May 04, 2006

No me lo creo


La naturalidad en las películas es algo que cada vez cuesta más encontrar. No hay que confundir demasiado el cine con la realidad aunque algunos lo hagamos con frecuencia, pero sí que resulta del todo inaceptable que una película supuestamente realista no sea creíble. Pienso en concreto en las películas del para mí muy sobrevalorado director de cine Fernando León de Aranoa; por una u otra razón he acabado viendo todas sus afamadas y premiadas películas y, sin llegar a calificarlas como malas (son, como mínimo entretenidas, lo cual no es poco) presentan en mi opinión un grave problema: no me las creo en absoluto. No me creo los diálogos que son siempre efectistas y con un trasfondo de filosofía urbana y de sueños de gente común; no me pueden parecer reales los "aforismos" que van soltando los niños de Barrio, no me creo las palabras del parado de Los lunes al sol y me suenan absolutamente artificiales las frases de la prostituta protagonista de Princesas. Son siempre frases estudiadamente ingenuas y los personajes que las pronuncian acostumbran a insistir sobre ellas pidiendo confirmación al interlocutor. ¡Eh, espectador mira qué guiones más buenos que escribo! ¿Te has fijado qué frase más buena?

Puede ser una percepción personal pero ese supuesto realismo me lleva siempre a recordar que estoy viendo una película. La gente no habla así; así los que hablan son los personajes de León de Aranoa. Puede que esto sea una característica del cine español, aunque los diálogos de Víctor Erice o de José Luis Guerin serían una contundente prueba de todo lo contrario, claro que el lenguaje cinematográfico es en estos casos afortunadamente muy distinto.

La clave, creo, está en que se trata de películas que aspiran a ser prácticamente hiperrealistas e incluso con un estilo de documental (Icíar Bollain también intentó algo parecido emulando a Ken Loach con mediocre resultado),lo cual es un error, pues si el tono de la película es otro, automáticamente se cambia la manera de mirar y se acepta como natural lo que en otras circunstancias no tendría por qué serlo.

Wednesday, May 03, 2006

Noticia luctuosa III

A estas alturas ya tendría uno que estar acostumbrado, pero no deja de parecer una verdadera salvajada que el Palau de la Música de Barcelona sea el lugar de esta ciudad en el que se celebre un concierto de... Camela

¡De Camela!

Tuesday, May 02, 2006

Squonk


El Squonk es de temperamento muy retraído y debido a su fealdad llora constantemente. Es presa fácil para los cazadores, los cuales simplemente siguen el rastro que dejan las lágrimas. Cuando se ve acorralado se disuelve en lágrimas.

¿Verdadero o falso?

Consejos insospechados

Cualquier cosa puede servir para que las personas indecisas tomen una decisión. Los indecisos contumaces saben muchas veces cuál es la decisión correcta, pero su condición les lleva a permanecer paralizados o, por lo menos, a demorar la acción indefinidamente. El indeciso frecuentemente pide consejo para que otros confirmen su decisión, aunque ésta existe sólo en su cabeza. Oir esta confirmación puede ayudar.

A veces, sin embargo, la confirmación de las decisiones --grandes para el indeciso pero normales o incluso evidentes para los demás-- pueden venir de la manera más insospechada: un comentario de alguna persona a la que jamás se le pediría consejo por no tener en principio nada en común con ella; la verbalización de la decisión de un "no indeciso" que comenta algo que le preocupa (hay que decir aquí que el indeciso no puede decidir para sí mismo, pero es un excelente consejero para los demás); la lectura de un dato aparentemente sin mayor importancia en un blog...

De todas formas, que el indeciso llegue finalmente a actuar, no significa que su decisión llegue a tener alguna consecuencia práctica.


Click here for standalone player
Download Windows Media Player Here